Algunas razones por las que quienes estuvimos esa noche en Leer juntos recomendamos su lectura:
- Hemos descubierto a una escritora, Parinoush Saniee y algunas circunstancias de su país, Irán.
- Los personajes femeninos nos han interesado. Sobre todo la madre del protagonista, Mariam, que nos parece una metáfora de lo que ocurre en Irán, no solo con las mujeres, sino con toda la sociedad. Una mujer culta que vemos como se va angustiando, amargarndo porque tiene que esconder sus deseos de libertad personal, para trabajar, para comunicarse en la familia y en la sociedad, por mantener la paz familiar y social.
La otra cara de la moneda será su propia madre, una mujer alegre, serena, decidida, que contrasta con la otra abuela de la familia, obstinada en mantener unas tradiciones que oprimen a la mujer.
Junto a ellas, la cuñada, la sobrina, la hija pequeña.
- Las voces: del niño protagonista, de su madre. Y nos preguntamos: ¿cómo sería la historia si se narrara desde la voz del padre?. Él, bien podría ser una de las voces escondidas del relato.
- Descubrimos a un hombre muy orgulloso que le importa más el éxito social que las relaciones personales, sobre todo las de su familia más cercana. Un hombre muy condicionado por las tradiciones más ancestrales, por la presión de su madre.
- Hemos descubierto historias dentro del relato total: los episodios en los que el pequeño protagonista reacciona violentamente por los episodios en los que siente miedo, se siente oprimido, insultado, utilizado o la historia de la prima.
- Son poderosos los silencios, los engaños, las mentiras, los celos, el machismo... En buena medida provocados por la opresión social y familiar. Y también el humor que nos hace sonreir cuando leemos episodios que podrían haber sido altamente dramáticos.
- Entre las presiones, además de la que vive la prima, nos han parecido especialmente duras las que sufre el hermano mayor.
- No podemos olvidarnos de Shahab, la voz escondida, el personaje que, junto a su madre, conduce la historia. El niño que es capaz - después de mucho sufrimiento, de muchas tensiones - de alzar la voz -elemento altamente metafórico también- y crecer, superar "la incapacidad para expresar los sentimientos".
El apoyo de su madre, la intervención de su abuela materna, el encuentro con una maestra comprensiva -tres mujeres-, la familia "adoptiva" -en un episodio que tiene tintes surrealistas- le ayudarán a salir de su autismo.
Y será la escritura el elemento que le de seguridad, que le permita expresarse y descubirse, así mismo, a la familia y a la sociedad que no es tonto. Y finalmente, sus logros serán reconocidos por el padre que se sentirá orgulloso de un hijo al que durante mucho tiempo rechazó y que fue rechazado -Shahab hablaba de él como el padre de..., como si él no fuera su hijo-.
- Al terminar la historia la autora, en boca de Shahab, deja mensajes de esperanza pese a que "hacía falta mucho tiempo para recuperar las ocasiones perdidas".
No hay comentarios:
Publicar un comentario